El monse Martínez Camino, secretario general de la conferencia episcopal, dice que "la utilización del preservativo siempre sucede en un contexto de inmoralidad".
Lo gracioso del caso es que millones de católicos españoles aceptan con la mayor naturalidad el ataque del jefe, a su vida sexual.Claro que bien mirado quizás sea porque las opiniones de estos señores les importan un pimiento, o que son unos falsos y al salir de misa pasan por la farmacia o por el super que es más discreto. A dios rogando y con el mazo (protegido) dando.
Todo esto tomado con humor y visto el condón como un método anticonceptivo, porque si nos ponemos a pensar la cantidad de personas, principalmente del tercer mundo que mueren a causa de enfermedades de transmisión sexual (el sida es la primera causa de muerte en África), deberíamos afirmar que la iglesia católica es la verdaderamente inmoral.
No hay comentarios:
Publicar un comentario